viernes, julio 06, 2007

Ayer


SÓLO me quedé con mis jeans sucios, mi playera gris que está rota del cuello y mis tenis negros con rayas cafés. Lo demás lo tiré. Toda mi ropa la quemé, mis cajones están vacíos, como siempre deberían haber estado. Ya no queda nada más en el closet. No hay más ropa mía, no hay camisas de marca, ni corbatas y tampoco zapatos; no hay más pasado, no hay más recuerdos, no hay más de mí, por lo menos el de antes.
Nunca me he sentido mejor, mi vida comienza ahora.