Fue el destino, el universo y los guardianes galácticos que me han protegido y no quieren que me vaya de este mundo (yo tampoco) y han decidido darme otra oportunidad (otra oportunidad!!!) de seguir por acá haciendo menso un rato más.
Algo importante debo hacer en esta vida para que me regresen los dioses y los diversos soles que existen en la galaxia para dejarme en la tierra.
He muerto varias veces, tengo más de nueve vidas, y una constelación compartida allá arriba, con los mejores. El aire es amarillo, y me indica el camino que debo seguir desde la tierra para descubrir ese algo que vine a hacer aquí, por eso regresé y no estoy convertido en polvo ni me he desintegrado aún.
Me quedo, no me voy del mundo. Existe tiempo para seguir siendo, queriendo ser, vivir para ser; he decidido no renunciar a la existencia hasta que tenga 90 años y mi barba sea suficientemente larga para tocar mis pies, esté sentado sobre un asteroide platicando con mis sobrinos, nietos y dragones imaginarios lo que soy, lo que nunca seré y lo que algún día fuí.
Sólo así me voy de aqui, no antes ni después. Los asteroides lo decidirán. Así lo imagino, así será.
Sólo así me voy de aqui, no antes ni después. Los asteroides lo decidirán. Así lo imagino, así será.
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Saludos y besos cósmicos totales!!
